CapÃtulo 6
2. El tipo loco
Cha Eui-jae agitó en el aire el cucharón de acero inoxidable que llevaba consigo. Obviamente era más duradero que una cebolla verde, por lo que era una herramienta decente para defensa personal. Continuó girando el cucharón mientras pensaba en los lugares a los que Park Ha-eun podrÃa haber ido.
No habÃa alertas de emergencia por grietas, asà que no habrÃa dejado a su abuela para evacuar a algún lugar... ¿HabrÃa ido al parque a esta hora? O tal vez se escapó para comprar más helado después de terminar el que tenÃa antes. Cha Eui-jae pensaba rápidamente mientras se dirigÃa hacia la calle principal.
TenÃa que encontrar a Park Ha-eun y llevarla a casa antes de que fuera demasiado tarde. Con esta determinación, Cha Eui-jae cerró los ojos.
<¡Ojo de Rastreador!>
Cuando abrió los ojos de nuevo, brillaban en azul. El paisaje frente a él se simplificó en lÃneas y superficies, como el plano de un edificio, permitiéndole ver incluso dentro de las estructuras. 'Ojo de Rastreador' era una habilidad que le permitÃa ver la luz única de una persona, útil para situaciones como esta, cuando necesitaba encontrar a alguien.
Donde habÃa personas, luces blancas parpadeaban como velas en su lugar. La luz de un niño era ligeramente más pequeña de lo normal. Cha Eui-jae escaneó el área detenidamente, pero parecÃa que Park Ha-eun no estaba cerca.
Mientras ampliaba el alcance de la habilidad, de repente— ¡bam!
Una llama púrpura ardiente captó su atención. Era la llama más brillante y grande que habÃa visto, lo suficientemente feroz como para consumir su entorno.
...¿Una llama?
La decisión fue rápida. Cha Eui-jae se movió apresuradamente hacia la llama.
Solo las personas despiertas, incluidos los cazadores, aparecÃan como llamas en lugar de simples luces. Aunque esta área tenÃa muchos cazadores, una llama tan intensa indicaba a alguien de calibre extraordinario. No era un cazador tÃpico; la llama era tan afilada e inmensa como la de un monstruo.
Asà que tenÃa que verificarlo por sà mismo. ¿Era solo un cazador con una gran voluntad o una amenaza potencial? Si era lo último... Park Ha-eun podrÃa estar en peligro. Cha Eui-jae apretó con fuerza el cucharón.
La llama ardÃa en un callejón no muy lejos del restaurante de sopa para la resaca. A medida que se acercaba a la llama, escuchó golpes y gemidos apagados que se hacÃan más fuertes. Alguien estaba golpeando a otra persona.
Al final del callejón, bajo la luz brillante de la luna, una figura grande vestida de negro pateaba sin piedad a alguien acurrucado en el suelo, en el centro de la feroz llama púrpura. El aura opresiva que emanaba de la figura le pinchaba la piel a Cha Eui-jae.
Al mismo tiempo, el agudo instinto de Cha Eui-jae se encendió. Lo podÃa sentir instintivamente. El tamaño de la llama y la presencia abrumadora, semejante a la de un monstruo. La figura frente a él era...
Del mismo rango que yo— rango S.
La figura que pateaba al hombre giró la cabeza bruscamente hacia Cha Eui-jae. Cha Eui-jae desactivó rápidamente su habilidad y dio un paso atrás. Ahora, la figura, antes oculta por la llama, se hizo clara.
Un hombre con una máscara de gas que cubrÃa todo su rostro, vestido con equipo táctico negro y usando zapatos de cuero brillante manchados de sangre. ParecÃa inconfundiblemente un cazador. Después de un largo silencio, el hombre de la máscara de gas apuntó directamente a Cha Eui-jae con su mano enguantada.
"Tú."
"..."
Cha Eui-jae permaneció inmóvil, impasible ante la voz que lo llamaba. La máscara de gas habló con pereza.
"Lo vi todo, como una perra con delantal."
"..."
Mientras Cha Eui-jae retrocedÃa hacia las sombras, la máscara de gas añadió, como advirtiéndole que no huyera.
"También llevas un cucharón."
Cha Eui-jae escondió discretamente la mano que sostenÃa el cucharón detrás de su espalda. ¿Lo vio porque es de acero inoxidable? Maldición, el tipo tiene buena vista. ¿DeberÃa empezar a usar un delantal táctico a partir de ahora?
En ese momento, el hombre en el suelo se estremeció y la máscara de gas lo pateó nuevamente en el estómago, sin dejar de mirar a Cha Eui-jae.
"¡Ugh!"
"Este bastardo se arrastra en cuanto ve una oportunidad..."
Murmurando con irritación, la máscara de gas presionó su pie contra el estómago del hombre, aún mirando fijamente a Cha Eui-jae.
"¿Eres un civil?"
"SÃ."
"Trabajando hasta tarde...?"
La pregunta de seguimiento parecÃa rutinaria. Después de otro silencio, la máscara de gas añadió una pregunta.
"¿Pero qué haces aquà afuera con un cucharón a esta hora?"
"Salà a buscar a mi sobrina. No está en casa."
Cha Eui-jae respondió con una voz deliberadamente calmada, haciendo un gesto con su mano a la altura de la cintura.
"¿Has visto a una niña más o menos de este tamaño? Es una niña de primaria con una cola de caballo."
Cha Eui-jae preguntó con descaro y la máscara de gas se encogió de hombros.
"No."
"Ya veo. Entonces, ¿puedo irme ahora?"
"Espera. Déjame preguntarle a él también."
El pie que presionaba al hombre se levantó brevemente, luego lo pateó de nuevo en el costado. Pero el hombre, aparentemente inconsciente, solo gimió.
"Lo siento. Este tipo no sabe nada. Su cerebro está frito por las drogas."
A pesar de sus palabras, la máscara de gas no sonaba en absoluto arrepentido. Probablemente solo querÃa una excusa para patear al hombre nuevamente. Pero Cha Eui-jae, más preocupado por encontrar a su sobrina que por un matón vestido de negro golpeando a alguien, no dijo nada más y sacudió la cabeza.
"No está bien. Gracias por las molestias. Me iré entonces."
"Espera."
Cuando Cha Eui-jae se disponÃa a salir del callejón, la máscara de gas de repente lo detuvo. Después de mirarlo fijamente por un momento, la máscara de gas inclinó ligeramente la cabeza. Su voz, lenta, parecÃa hacer que cada acción fuera aún más pausada.
"Extraño."
"..."
"¿Nos hemos visto antes?"
"No."
"¿...De verdad?"
Cha Eui-jae lo miró de vuelta, con una expresión que mostraba que realmente no lo reconocÃa. No habÃa ni rastro de engaño; realmente se estaban encontrando por primera vez. No habÃa manera de olvidar a alguien con una apariencia tan distintiva. Cha Eui-jae supuso que este tipo vestido de negro debÃa ser un cazador recién despertado, alguien que habÃa entrado en la grieta mientras él estaba dentro.
Después de escrutar a Cha Eui-jae por un momento, el hombre de la máscara de gas presionó un dedo contra sus labios, indicándole que guardara silencio sobre lo que habÃa visto. Lidiar con la policÃa o la oficina de gestión complicarÃa las cosas, después de todo.
Cha Eui-jae, entendiendo lo problemático que serÃa ser atrapado golpeando a alguien en un callejón, asintió de buena gana. De todos modos, no habÃa nadie a quien pudiera contarle, asà que era más fácil fingir que no habÃa visto nada. La máscara de gas agitó la mano, indicándole que podÃa irse.
Justo entonces.
Creak... Creak...
¡Chirrido!
Picos afilados brotaron de la espalda del hombre en el suelo, disparándose hacia Cha Eui-jae. Incluso viendo los picos dirigirse hacia él, Cha Eui-jae no entró en pánico. En su lugar, se movió tranquilamente hacia un lado, ajustó su agarre en el cucharón y se preparó. Entonces...
¡Kaang!
¡Desvió perfectamente los picos con el cucharón!
Quizá deberÃa haber seguido una carrera en el béisbol. Tal vez no hubiera bateado jonrones, pero un triple parecÃa estar a su alcance. Sintiendo un poco de orgullo, Cha Eui-jae abrió y cerró la mano un par de veces, mirando involuntariamente al hombre de la máscara de gas. Este último sostenÃa el pico que Cha Eui-jae habÃa desviado en su mano.
"..."
"..."
¿Lo... lo atrapó por mÃ?
ParecÃa que sÃ. El principio básico para los cazadores era proteger a los civiles, y después de todo, Cha Eui-jae supuestamente era un civil que buscaba a su sobrina en medio de la noche. Incluso si acababa de agitar un cucharón para desviar el pico, seguÃa siendo un civil que necesitaba protección.
Una gota de sudor frÃo recorrió la espalda de Cha Eui-jae. El silencio incómodo se alargó.
"..."
"..."
Maldición.
¿Qué clase de civil agita un cucharón contra un pico que vuela hacia él? Cha Eui-jae querÃa abofetearse por no haber actuado correctamente como un inocente y asustado transeúnte. Huir obviamente no era una opción en este momento. Entonces, la única opción que le quedaba era noquear al hombre de la máscara de gas. ¿Con cuánta fuerza y dónde deberÃa golpear para noquearlo sin matarlo? Los Despiertos podrÃan soportar un golpe más fuerte, ¿verdad?
Con el cucharón como su arma, era difÃcil calcular la fuerza necesaria. El tipo de la máscara de gas no era alguien que se tomara a la ligera, especialmente después de haber atrapado ese pico con la mano desnuda. Cha Eui-jae, perdido en una profunda contemplación, se quedó congelado como un robot averiado.
Mientras tanto, el hombre de la máscara de gas metió sus guantes en el bolsillo y cruzó los brazos lentamente, como si estuviera esperando la reacción de Cha Eui-jae. Finalmente, Cha Eui-jae volvió a la realidad y lo enfrentó.
Ha...
La vida apesta...
En esta situación, la única opción era una salida directa— o más bien, una escapatoria directa. Cha Eui-jae miró al vacÃo por un momento antes de inclinarse educadamente.
"...Me voy ahora. Realmente necesito encontrar a mi sobrina."
Protocolo de escape de la realidad activado.
"Oye—"
Pero el tipo de la máscara de gas no habÃa terminado. Arrastrando sus palabras, dio un paso más cerca. 'No me hables más.' Cha Eui-jae dio dos pasos hacia atrás, pero el tipo de la máscara de gas ya habÃa cerrado la distancia. Su sombra, alargada por su alta estatura, cubrÃa completamente a Cha Eui-jae. Una risa suave se filtró a través de la máscara de gas.
"¿Cuál es tu nombre?"
"No tengo nombre."
"Ah... ¿aún no has decidido un nombre de cazador?"
"No, simplemente no tengo nombre."
"¿Te doy uno?"
"¿Acaso ofreces un servicio de nombres o algo asÃ?"
"Estoy pensando en empezar uno temporal."
Cuanto más intentaba Cha Eui-jae escapar, más se hundÃa en la conversación, como un pie atrapado en arenas movedizas. La única manera de salir de un pozo de arenas movedizas es dejar de luchar. Cha Eui-jae respiró hondo y calmó su voz.
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