CapÃtulo 263
26. Investigación
ParecÃa que Honeybee habÃa pensado lo mismo, pues lo miraba con ojos entrecerrados.
“¿Vas directo al grano?”
“¿No lo habÃan hablado ya? Irse por las ramas serÃa una pérdida de tiempo. Además…”
Nam Woo-jin miró brevemente a J.
“Dijiste que él no ha olvidado su presencia aquÃ. Estoy seguro de que logrará hacer algo al respecto.”
“…”
“Como saben, enfrentamos una grave escasez de personal. El no tener recuerdos no significa que puedas sentarte sin hacer nada.”
Irresponsable. Desde atrás, Cha Eui-jae apretó el puño en silencio. Nam Woo-jin abrió la puerta herméticamente cerrada y entró.
En la oscura habitación, una máquina enorme que se asemejaba a un telescopio se erguÃa en el centro, y tres piedras mágicas azules giraban a su alrededor. Incómodo por las miradas inquisitivas de Honeybee y Cha Eui-jae, Lee Sa-young señaló la máquina con su dedo Ãndice.
“¿Qué es eso?”
“Es el Dispositivo de Observación del Blanqueamiento.”
¿Qué se supone que significa eso? Una vez más, Honeybee y Cha Eui-jae empujaron a Lee Sa-young por la espalda. Con el ceño fruncido, Lee Sa-young volvió a preguntar.
“…¿Qué significa?”
“¿También olvidaste qué es el Blanqueamiento?”
“Parece que sÃ.”
“¿Y ustedes dos no le explicaron?”
“No sabÃamos que no lo sabÃa.”
Honeybee y Cha Eui-jae añadieron sin vergüenza. Nam Woo-jin les lanzó una dura mirada y suspiró.
“…Realmente no hicieron nada. Recuerdan que se descubrió en el páramo, ¿verdad? El Blanqueamiento se refiere a un fenómeno en el que, influido por el fin, la tierra se vuelve inhabitable. El páramo es un área afectada por el Blanqueamiento. La tierra contaminada con ceniza blanca se convierte en un lugar estéril y muerto, donde no puede crecer ni una sola brizna de hierba.”
“¿Qué causa esto?”
“Se los dije antes. Este mundo está colapsando debido al apocalipsis. Es un fenómeno provocado por el fin.”
Nam Woo-jin habló con calma, incluso al mencionar el apocalipsis y el colapso. Lee Sa-young entrecerró los ojos levemente.
“¿Solo estás aceptando el colapso?”
“Por supuesto que no. Aún estamos luchando contra ello.”
“…”
“Pero a este ritmo… no lo sé.”
Nam Woo-jin contuvo sus palabras. Cha Eui-jae, con las manos cruzadas detrás de su espalda, reflexionó cuidadosamente. En su mundo, la primera fase del apocalipsis era la aparición de monstruos. ¿Qué habÃa sucedido aquÃ?
“Si pudieras contarnos las etapas o el orden del apocalipsis, serÃa útil.”
“¿Etapas? Ah…”
Pareció ser una buena pregunta. Nam Woo-jin asintió y luego manipuló el observador. Pronto, una imagen de un monstruo de gran boca apareció en el aire. Era un monstruo que habÃa surgido en su mundo para devorar humanos.
“Comenzó con la aparición de los Big Mouths. Después de que el agujero negro se transformó en un agujero blanco, empezaron a aparecer por todos lados, devorando humanos, edificios… todo indiscriminadamente.”
“…”
“Estas criaturas tienen mala vista pero son sensibles a la presencia y el olor. Y todo lo que comen… desaparece por completo. Aniquilación serÃa la palabra adecuada.”
Honeybee bajó la mirada y suspiró.
“Es como si sus estómagos estuvieran conectados a los vacÃos del mundo. No importa cuánto devoren, nunca sacian su hambre. Siguen comiendo, y comiendo, hasta que su vida se agota.”
“…”
“El número de Big Mouths disminuyó naturalmente. Aprendimos cómo enfrentarlos, y por alguna razón, dejaron de aparecer después de cierto tiempo. La siguiente fase fue… una ola de monstruos.”
Cha Eui-jae y Honeybee alzaron la cabeza al mismo tiempo. Una ola de monstruos, un fenómeno que aún no habÃa aparecido en su mundo.
“Monstruos afectados por el Blanqueamiento brotaron de mazmorras y portales. PodrÃas llamarlo la fase de números abrumadores. Afortunadamente, logramos manejarlo, pero estos monstruos transformados dispersan ceniza blanca al morir.”
“…”
“Como resultado, cuanto más monstruos matamos, más rápido se acelera el Blanqueamiento.”
“…¿Cuál es la siguiente fase?”
“Está sucediendo ahora.”
Los ojos quemados de blanco de Nam Woo-jin se fijaron en los tres. Bañado en la luz azul de las piedras mágicas, lucÃa extrañamente inhumano mientras levantaba las comisuras de su boca en una sonrisa.
“Mutación.”
“…”
“Los humanos se están convirtiendo en monstruos.”
El rostro de Honeybee se endureció. Todos debÃan estar recordando la misma escena. HabÃa dejado a un camarada que se habÃa convertido en monstruo escondido detrás del Gremio Seowon. No sabÃa cuánto tiempo permanecerÃan allÃ.
“No muchas personas lo saben, pero al menos todos aquà lo sabÃan. Alguien lo olvidó.”
“¿Hay alguna forma de detenerlo? ¿O alguna manera de revertir a aquellos que se han convertido en monstruos?”
Honeybee preguntó, presionando por una respuesta. Nam Woo-jin se encogió de hombros, como si la pregunta fuera ridÃcula.
“¿Por qué preguntas lo que ya sabes? No hay forma de detenerlo, ni manera de revertirlo. Sin embargo, los humanos expuestos al Blanqueamiento por perÃodos prolongados parecen mutar más rápidamente… Eso es solo una conjetura.”
“…”
“Estamos trabajando con otros sanadores e investigadores para encontrar una vacuna, pero… bueno, no estoy seguro de si será posible.”
Su voz carecÃa de fuerza. Honeybee apretó los labios con fuerza, y sus puños temblaban. Cha Eui-jae dio un paso al frente para protegerla.
“Gracias por su tiempo, doctor.”
“J.”
Con los brazos cruzados, Nam Woo-jin respondió secamente.
“CuÃdate. ¿Entiendes? No tienes que hacerlo todo. Salvar el mundo solo es posible mientras estés vivo.”
“…”
“Tu cuerpo es una bomba de tiempo, lista para estallar en cualquier momento. Ten cuidado. Si parece demasiado, corre. Y ven directamente a mÃ. ¿Entendido?”
Cha Eui-jae parpadeó. La verdad es que se sentÃa pesado. Desde que entró en el Gremio Seowon y se convirtió en el reemplazo de J en este mundo, habÃa sido asÃ. Pero no podÃa mostrarlo. Asintió lentamente, sintiendo un dolor agudo en el pecho.
“SÃ.”
“…Pueden retirarse ahora. No los retendré más tiempo. Probablemente necesiten estar junto a Lee Sa-young de todos modos.”
Nam Woo-jin agitó la mano, despidiendo a los tres. La puerta se cerró con un golpe. Honeybee, quien habÃa estado caminando mecánicamente, de repente se detuvo. Miró hacia atrás con una expresión decidida.
“No tenemos a dónde ir, ¿verdad? ¿Nada urgente?”
“PodrÃamos inventar algo, pero por ahora, no.”
“Entonces, quiero visitar el Gremio HB.”
“…”
“No tienen que acompañarme. Solo quiero ir sola…”
La voz de Honeybee se fue apagando. ¿Esperaba ver a Matthew? En su mundo original, él no habÃa despertado por mucho tiempo. Cha Eui-jae comprendÃa bien ese sentimiento. Asintió lentamente.
“Está bien.”
“…”
“Ve. Además, necesitamos información sobre otras personas. Nos encontraremos en… frente al Gremio Seowon. Jung Bin estará ahà también.”
Honeybee miró a Lee Sa-young, como si buscara su opinión. En lugar de responder, él asintió levemente. Luego, de repente, Honeybee abrazó a Cha Eui-jae con fuerza, casi dejándolo sin aire. Sorprendido por el repentino calor y el dolor, solo parpadeó. Honeybee susurró suavemente.
“Gracias.”
El fugaz abrazo terminó rápidamente. Después de soltar a Cha Eui-jae, Honeybee se fue. Mientras veÃa su figura encogerse a la distancia, masajeó el hombro que ella habÃa sostenido, y luego sintió un peso asentarse allÃ. Lee Sa-young se apoyaba contra él. Cha Eui-jae preguntó, incómodo.
“…¿Qué pasa?”
“¿Por qué no me abrazas a mÃ?”
“Eso fue un impulso de Honeybee.”
“SÃ… y te vi darle una palmada en la espalda.”
“…”
Una observación muy aguda. Mejor resolver esto antes de que empeore. Cha Eui-jae extendió los brazos ampliamente. Lee Sa-young rodeó su cintura y lo atrajo hacia él, llenando el espacio con su sólida figura. Cha Eui-jae le dio unas palmaditas en la espalda, mientras el cabello suave de Lee Sa-young le rozaba la mejilla, el oÃdo y el cuello.
“¿Esto es suficiente?”
“…Es rápido.”
“¿Eh? ¿Qué es?”
“Tu ritmo cardÃaco.”
“…”
“También se oye un sonido rasposo…”
Unos dedos se deslizaron entre sus pechos presionados, y una gran mano se posó sobre el corazón de Cha Eui-jae. Los ojos violetas y astutos de Lee Sa-young se clavaron en la máscara de Cha Eui-jae. Maldición, pensó que era celosÃa, pero resultó ser un control de su estado. Cha Eui-jae intentó alejarse, inclinándose hacia atrás, pero sus brazos no tenÃan tanta fuerza como esperaba.
‘¿Qué?’
Confundido, Cha Eui-jae cerró los dedos involuntariamente contra el pecho de Lee Sa-young. Los brazos alrededor de su cintura se apretaron aún más. Incluso un abrazo normal dolÃa. ¿Por qué es tan fuerte?
No habÃa otra opción.
Cha Eui-jae cerró los ojos con fuerza y murmuró.
“Me haces… latir el corazón, idiota…”
“…”
Los ojos violetas parpadearon lentamente, y luego apareció una leve sonrisa. Las largas pestañas revolotearon, y unos labios tocaron suavemente la máscara negra de Cha Eui-jae.
“Oh… ¿en serio? ¿Te hago latir el corazón?”
“Si sabes eso, ¡suéltame! ¿Qué pasa si alguien nos ve?”
“No importa. Puedo sentir si alguien se acerca.”
“No importa. Suéltame…”
“¿Te duele, verdad? Ahora mismo.”
“¿De qué hablas—”
Cuando Lee Sa-young apretó su agarre alrededor de la cintura de Cha Eui-jae, un pequeño jadeo escapó. Cha Eui-jae apretó los dientes y bajó la cabeza. Un dolor agudo se extendió por su cuerpo. Su cuerpo tembló. Lee Sa-young lo soltó, luego lo sostuvo cuidadosamente mientras su cuerpo se tambaleaba. Un beso ligero tocó su sien perlada de sudor frÃo.
“Terco.”
Cha Eui-jae luchaba por recuperar el aliento, murmurando una maldición entre dientes. Su visión se nublaba repetidamente.
“…Maldito…”
“Lo siento. Tuve que hacerlo asà porque de otra forma no lo admitirÃas.”
La suave caricia en su nuca fue lo último que sintió. Su visión se desvaneció en la oscuridad.
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